Este requerimiento se realizó tras verificar las largas colas, formadas por personas que conforman grupos vulnerables, como mujeres con sus hijas e hijos, personas adultas mayores, pobladores indígenas en situación de pobreza o pobreza extrema, que requieren una especial protección. Cabe indicar que estas filas se realizan en medio de la vía pública, lo cual también pone en riesgo su integridad física.
En ese sentido, la oficina defensorial indicó que, si bien en la agencia se ha dispuesto el aumento del horario de atención y el incremento de profesionales para la atención en ventanilla, haciendo un total de 3 personas, esta cantidad no es suficiente, más aún en un contexto de emergencia sanitaria donde deben evitarse las aglomeraciones y garantizar el distanciamiento social.
Al respecto, la jefa de la oficina de la Defensoría del Pueblo en Amazonas, Genoveva Gómez, detalló que esta problemática viene desde hace varios años debido a que, al ser la única agencia en toda la provincia de Condorcanqui, la población concurre para realizar diversos trámites y no solo para cobrar los bonos otorgados por el Gobierno. Asimismo, atiende a la ciudadanía proveniente de diversos distritos del departamento de Loreto, quienes ven por conveniente efectuar sus trámites en dicha agencia dada su cercanía.
Cabe recordar que, según el Censo 2017, la provincia de Condorcanqui alberga a 42 479 personas, de las cuales cerca del 91 % vive en zona rural y un promedio de 35 000 ciudadanas(os) se autoidentifican como parte de alguno de los pueblos indígenas que se ubican en el departamento, principalmente de awajún y wampis.
Finalmente, la oficina de la Defensoría del Pueblo en Amazonas reiteró que se deben implementar medidas extraordinarias para garantizar la atención especial y célere de la población vulnerable, y asegurar que el personal del banco que atiende a la ciudadanía cuente con los equipos de protección personal para evitar contagios de COVID-19.