En medio de la pandemia de coronavirus, las casas de culto se vieron obligadas a cerrar por tiempo indefinido, pero esto les llevó no tanto a descubrir, sino más bien a sacar provecho de cómo llevar sus servicios, rituales y otras prácticas religiosas a través de internet de una manera atractiva por medio de YouTube o Facebook.
Algunas comunidades religiosas han descubierto que conectarse en línea ha ayudado a atraer nuevos visitantes o recuperar miembros que habian dejado de asistir a sus iglesias, ya sea porque no podían llegar fácilmente a sus lugares de culto debido a la distancia, o conflictos de horarios o tambien discapacidad. Para algunos, se les está haciendo que la religión sea más accesible que nunca.